Durante la última semana, el mercado reflejó un notable incremento en la confianza de sus participantes, quienes consideran que quizás el clímax del conflicto comercial entre EE. UU. y China ya quedó atrás. Esta nueva confianza ha impulsado los principales índices en el mundo, ha reducido los precios del oro y ha estabilizado, en cierta medida, el mercado de bonos en EE. UU.
Han sabido defenderse. Hasta ahora, los resultados corporativos parecen no haberse visto afectados por el contexto mundial y han permanecido mayormente intactos; incluso algunas compañías se vieron más favorecidas de lo habitual gracias a ciertas estrategias de prevención frente a los aranceles.
Sin duda, esto ha sido motivo de tranquilidad. En EE. UU., el 73 % de las compañías que han presentado sus resultados han superado las expectativas (ya ha reportado el 36 % de las empresas que componen el S&P 500), incluso superándolas por un margen mayor al habitual. Es importante destacar que las proyecciones de las principales empresas se han mantenido estables para lo que resta del año, dejando de lado el temor a una posible recesión económica. Para esta semana, esperamos los resultados de los gigantes Meta, Microsoft, Apple y Amazon.
Los temas de interés siguen siendo los de siempre: los aranceles, una semana más, continúan marcando el ritmo del mercado, y la relación comercial entre EE. UU. y China parece haber avanzado, generando una caída en el índice de volatilidad (VIX). Además, el estado de salud de la economía estadounidense sigue siendo una preocupación, que será nuevamente medida mediante el índice de inflación PCE de marzo, que se presentará el miércoles, y el informe de empleo, que será publicado el viernes para cerrar la semana.
Aunque el equilibrio sigue siendo insuficiente, la reanudación de las negociaciones comerciales, la calma en la volatilidad, una posible anticipación de medidas por parte de la FED, junto con indicadores macroeconómicos y corporativos aceptables, han dado un aire de confianza en medio de un mercado emocionalmente afectado por la incertidumbre, generando, a partir de estos hechos positivos, renovadas expectativas.